miércoles, diciembre 21, 2005

Dos poemas de Leopoldo Castilla

   Círculo

   A José Antonio Gabriel y Galán

Concibieron el círculo radiante, su forma
pariendo desde un centro
y en realidad
fue lo exterior, el universo, esa sillla,
un caballo
todo lo externo modulado
para finalizar esa esfera

           tu ojo no emite
           atrae

ese niño con un balón entre las manos
juega
con el último punto de la materia
con el fin del mundo.



    Con los pies en la tierra

       A Mario Trejo

Hay un instante
en que la mesa vuelve en sí
en que el árbol se reúne
y es de nuevo
ramas, hojas y un pájaro lógico

todo recompone la escena
los límites
que hagan verosímil a ese hombre mirando la siesta

él
considera que realmente ha aparecido
que tiene tiempo
y para sobre la sombra del árbol
cree que toca tierra

           dentro de un orden
           el conocimiento
           es eternidad que se pudre

pero el azar absuelve:
el pájaro ya no sostiene
el árbol
torcido por el cielo

1 comentario:

ژ ژ gallo dijo...

Para Castillas y salteños, prefiero por bastantes cuerpos a Manuel. Basta con escuchar (en cualquier versión) 'Cartas de amor que se queman'.
salú,
jjg