domingo, mayo 29, 2005

Secador

A. me cuenta que en Estados Unidos, entre las instrucciones visibles de los micro-ondas, figura la siguiente leyenda: no secar a su gato en el interior.

Según ella sólo a un yanqui se le puede ocurrir tal cosa. Es que años atrás un hombre metió a su mascota en el hornito tras bañarla, y ésta estalló -literalmente- en interior del aparato...

1 comentario:

explorador54 dijo...

Qué bestia! Cómo se le ocurre bañar a un gato!